Desde el momento de la histórica redada de los americanos sin fronteras del FBI contra los responsables de Megaupload, las noticias han ido saltando de medio en medio, y algunas en supuestos sitios con credibilidad, rizando el rizo de la manipulación sensacionalista.
En casi todos lados se nos presenta al singular cabecilla de Megaupload, el alemán Kim Schmitz, más conocido en la red por el nick de Kim Dotcom, como un personaje patético en sus excentricidades. Las fotos de sus mansiones, sus más de 50 coches de lujo, fotos con modelos en las playas del caribe y su sempiterna cara de cabrito güasón, donde parece que se rie no sólo de laindustria del entretenimiento, sino de todos nosotros.
Parece que el que se haya lucrado con el trabajo de otros y haga ostentación de ello es motivo suficiente para que el FBI te detenga en cualquier parte del mundo y te lleve a juicio. Mientras, la gran mayoría de medios te puede crucifica juzgándote de antemano, con acusaciones de todo tipo (desde pornografía infantil hasta terrorismo), la mayoría con dudosos fundamentos. Pero por lo visto no sucede lo mismo con los miles de altos ejecutivos que en todo el mundo han recibido dinero de cada estado, de todos nosotros, que se prejubilan con cifras desorbitadas para antes de la crisis creada por ellos, y que esas cifras sean directamente pornográficas a día de hoy.
Da igual que las noticias vuelen con los detalles de vacaciones de lujo de los altos ejecutivos en los momentos más inquietantes del comienzo de la absurda crisis, porque está claro que es la manera de oficialmente reirse en nuestra cara, por no decir que se nos mean encima y ni siquiera tienen el detalle de decirnos que llueve…
Pese a quien pese, este enriquecido Kim Dotcom, principal responsable de Megaupload, habrá hecho mucho daño a la industria del entretenimiento americana, pero también hizo el trabajo que ésta debería haber hecho. Ofrecernos descargas rápidas y seguras de todo tipo de contenido dejando de lado su caduco sistema de una vez por todas.
La industria se haya en una especie de coma autoinducido hace ya mucho, y ahora se queja del negocio que ha perdido, tratando directamente de cambiar las leyes a su antojo para que aprovechando la crisis donde casi todo vale, ganar millonarias indemnizaciones, prohibir cualquier cosa que pueda perjudicarles, y en el camino, quitarnos para siempre la intimidad que hasta ahora venimos disfrutando en internet de un zarpazo.
Grandes titulares nos advierten a bombo y platillo que las recaudaciones en los cines y en los servicios de pago “legales” se han incrementado de manera espectacular, pero la verdad es que todo sigue casi como estaba, pero eso sí, los perjudicados se cuentan también por millones de usuarios que usaban el servicio de Megaupload para compartir o guardar en la nube contenido personal. Y no sólo usuarios privados, sino muchas empresas. Ahora esos datos son del FBI y podrán hacer lo que les venga en gana.
Si eres como nosotros uno de los afectados en este tema, te gustará leer que ya hay movilizaciones de los diferentes partidos piratas del mundo y diferentes plataformas de usuarios pararecoger firmas y hacer una denuncia conjunta. Para acceder al formulario de esta denuncia online, haz click aquí mismo.
